UC - Críticas
| País: USA. |
Interpretación: George Clooney (Matt King), Judy Greer (Julie Speer), Matthew Lillard (Brian Speer), Beau Bridges (primo Hugh), Shailene Woodley (Alexandra), Robert Forster (Scott Thorson), Nick Krause (Sid), Amara Miller (Scottie King), Mary Birdsong (Kai Mitchell), Rob Huebel (Mark Mitchell). |
EL VIAJE EMOCIONAL
"Los Descendientes" nos llega precedida de excelentes críticas y plagada de premios, lo cierto es que se trata de un interesante film de un excelente director que siempre sabe proponer historias desde una óptica diferente a la habitual. Y es que la película se mueve en ese género tan poco común y de difícil equilibrio que es la tragicomedia, pero siempre desde la discreción de su sobria e inteligente puesta en escena, donde en apariencia no pasan grandes cosas, pero que bajo esa superficie se proponen reflexiones bien profundas.
En “Los descendientes”, Matt King (George Clooney), casado y padre de dos niñas, se ve obligado a reconsiderar su pasado y a encauzar su futuro cuando su mujer sufre un terrible accidente de barco en Waikiki. Matt intenta torpemente recomponer la relación con sus hijas —la precoz Scottie, de 10 años, y la rebelde Alexandra, de 17—, al mismo tiempo que se enfrenta a la difícil decisión de vender las tierras de la familia. Herencia de la unión entre la realeza hawaiana y los misioneros, los King poseen algunas de las últimas zonas vírgenes de playa tropical de las islas, de un valor incalculable. Cuando Alexandra suelta la bomba de que su madre tenía una aventura amorosa en el momento del accidente, Matt tiene que empezar a mirar con ojos nuevos toda su vida, por no hablar de su herencia, durante una semana plena de cruciales decisiones. Con sus hijas a cuestas, Matt se embarca en la azarosa búsqueda del amante de su mujer. A lo largo del camino, donde se van alternando encuentros divertidos, conflictivos y trascendentales, Matt comprende que por fin se halla en la buena dirección para reconstruir su vida y su familia.
Para mi gusto, cinematográficamente "Los descendientes" no llega a la altura de "Entre Copas", aunque tal vez esta sea una película más madura. Me sobran algunas cosas como el estúpido noviete de la hija mayor (aunque luego se justifique su presencia con una estupenda escena donde se sincera con Clooney). Payne nos propone un viaje emocional en el que sin darse cuenta participará cada uno de los personajes, centrados principalmente en el interpretado de forma contenida y creíble por George Clooney, bien secundado por la debutante Shailene Woodley y con algunas apariciones estelares por parte de Beau Bridges, Robert Forster y Judy Greer. Todos ellos con el transfondo de los paisajes paradisiacos de Hawai que logran un contraste extraño con las situaciones que se nos plantean (como la música típica de la zona que no para de sonar en la banda sonora que contrasta con los sentimientos del protagonista), pero como dice el propio personaje de Clooney durante la película: "¿Paraíso? El paraíso se puede ir a la mierda".
La película tiene grandes momentos de emoción contenida, nunca se busca la lágrima ni la exageración, todo se plantea con un realismo poco habitual en el mundo del cine, donde las emociones son reconocibles, los personajes contradictorios y las situaciones son sencillas para hablar de grandes temas como la muerte, la superación de la misma, la familia, el dolor, la dignidad, el perdón, el conocimiento de los otros y el propio, o el valor de las posesiones materiales en contraposición al valor de lo realmente importante en nuestras vidas. La película gana en intensidad a medida que avanza y termina con un plano final igual de sencillo que el resto del film, pero también enormemente bello.
